INSTITUTO ALEMÁN BUSCA FORTALECER RELACIÓN ENTRE PADRES E HIJOS
Con éxito culminó un ciclo de charlas y talleres programado por el Instituto Alemán de Frutillar, orientado a fortalecer las habilidades parentales, herramientas necesarias para hacer frente a los desafíos de la crianza y relaciones intrafamiliares en un mundo cambiante y complejo. Este espacio fue orientado sobre todo a padres y madres de preadolescentes y adolescentes, así como a alumnos y alumnas desde quinto año básico a cuarto medio.
De manera entretenida e interactiva, alumnos y apoderados pudieron, por separado, dialogar y expresarse en torno a temáticas como sexualidad y embarazo adolescente, autocuidado y uso de drogas, así como también sobre estrategias y espacios para fomentar la confianza y el respeto a los límites entre padres e hijos.
A cargo de las destacadas psicólogas Marcela Rioseco y Claudia Tascón, especialistas en psicoterapia y educación emocional, los talleres permitieron a los estudiantes expresarse con libertad y de manera reflexiva, permitiendo luego conectar las conclusiones y aprendizajes con las inquietudes de los apoderados, mediante dos charlas interactivas con padres y madres de enseñanza básica y media. Tras estos encuentros, la psicóloga Claudia Tascón destacó la confianza que se generó en la interacción con los alumnos: “Logramos llegar a un estado donde ellos permitieron hablar de sus sueños, proyectarse a cinco años más, con qué sueñan, cuáles son sus expectativas, qué las podría entorpecer, y ahí cruzamos algo muy lindo, la información de los padres con la de ellos, entonces se entregó una reflexión pausada, sentida, y ellos confiaron. Es muy rico sentir que se generan confianzas”, valoró la profesional.
Por su parte, la psicóloga Marcela Rioseco puso el acento en las inquietudes e incertidumbres que se generan a medida que los hijos crecen. Esto se acrecienta, explicó, en: “Papás de los chicos adolescentes, que tienen aprehensiones y preocupaciones normales de la etapa de la vida en la que están, de los comportamientos de riesgo que pueden tener, de los obstáculos que pueden encontrar en el camino para poder desarrollarse o estudiar. Temas como las drogas, la sexualidad, la frustración, el no poder cumplir sus metas, sus sueños. Yo diría que es en los papás de los niños más grandes donde se nota mayor tensión y mayor desafío”, explicó.
Este espacio de diálogo y reflexión es la continuidad de talleres realizados durante el primer semestre, enfocados directamente a prevenir conductas de riesgo. Ambas instancias fueron posibles gracias al apoyo del Centro de Padres del Instituto Alemán de Frutillar.